Como una de esas hazañas deportivas a la que estamos acostumbrados los uruguayos, los cinco jóvenes colonienses Manuel Bravo, estudiante de Licenciatura en Sistemas de Universidad ORT Uruguay, Christian Zurbrigg, Lucas Díaz, Santiago Rosa y Matías López lograron el título de la categoría IEEE Standard Education Kits – SEK en la competencia de robótica XII LARC.
Primeros pasos
Sus comienzos en la robótica se remontan a 2010 cuando Manuel y Christian estudiaban 6º año en el Liceo Nº1 de Colonia.
Ambos jóvenes y fueron invitados a participar de un taller de robótica para aprender a programar en Lego Mindstorms NXT, y así participar del Concurso Estudiantil de Robótica - RAES (Robótica Aplicada a la Enseñanza Secundaria) departamental y nacional.
“No teníamos ni la más mínima idea de lo que era la robótica y mucho menos la programación, pero nos ganó la curiosidad y con Christian nos anotamos en ese taller. Ahí fue el momento donde comenzó nuestra odisea con los robots Lego” recuerda Manuel.
Concursos
La aventura tuvo sus momentos buenos y sus momentos no tan buenos: salieron segundos en el evento Sumo.uy del año 2010; en la edición 2011 ganaron el primer y segundo puesto en distintas categorías; en 2012 decidieron participar de una categoría más difícil y clasificatoria para un evento internacional pero esa vez no lo lograron, sabían que tenían que prepararse más.
Por su parte, Santiago, Matías y Lucas participaron en RAES y obtuvieron el primer puesto.
De esta manera, los cinco jóvenes decidieron aunar conocimientos y ganas, y se prepararon con suficiente anticipación para participar en varias categorías de la edición 2013 de Sumo.uy.
El gran salto
Manuel asegura que la preparación para la prueba fue larga pero valió la pena el esfuerzo.
Hubo que comprar los materiales y construir las pistas porque no tenían dónde probar el robot, además pasaron por muchos diseños.
Finalmente consiguieron la victoria en la categoría clasificatoria para competir en el XII LARC, celebrado en Perú en octubre.
Desde Colonia a Perú
¿Cómo se paga el viaje?
Faltaba un mes para la competencia y todavía no sabían si iban a viajar porque no contaban con el dinero suficiente para financiar los pasajes.
A partir de ese momento comenzaron una carrera contrarreloj para conseguir los fondos que les faltaban; recorrieron varias empresas de Colonia de las cuales recibieron poco apoyo, por lo que Manuel decidió recurrir a la ayuda de la Facultad de Ingeniería de ORT en donde estudiaba en ese momento.
ORT colaboró con una suma importante para los pasajes y la Facultad de Ingeniería de la UdelaR los premió, por el primer puesto de Suma.uy, con otro monto en efectivo.
Si bien estos dos aportes fueron de gran ayuda, los jóvenes no estaban ni cerca de cubrir todos los gastos del viaje que alcanzaban los siete mil dólares.
A dos semanas del viaje no lograban juntar el dinero, por lo que recurrieron a su propio bolsillo y a un préstamo que les ofreció la Asociación de Padres y Alumnos del Liceo Nº 1 de Colonia.
Como último recurso abrieron una cuenta en Abitab para que todo el que quisiera pudiera colaborar.
Así, con un poco de aquí y un poco de allá, lograron juntar todo el dinero necesario para partir rumbo a Perú en busca del título.
La partida
Sobre el mediodía del lunes 21 de octubre de 2013 salieron de Colonia rumbo al aeropuerto de Carrasco. Seis horas después, el avión partía con destino a Arequipa, Perú.
Una vez en Perú, la experiencia fue excelente, Manuel asegura que fue una competencia muy sana, “las charlas fueron muy amistosas con todos los equipos desde el comienzo. Participaron jóvenes de Brasil, Chile, Bolivia, Paraguay, Perú, México y Venezuela, todos siempre con buena onda”.
Uruguay 1 – Brasil 0
La competencia
La modalidad de este año se llamaba THball (Throw and Hold), se competía en una pista de dos metros por dos metros dividida a la mitad por una red de diez centímetros de alto. El juego consistía en tirar, por medio de un robot, pelotitas hacia el campo contrario.
El equipo ganador era el que sumaba más puntos durante el encuentro.
Los uruguayos lograron un tercer puesto en la ronda inicial. El día siguiente ganaron los cuatro partidos del grupo sin mayores complicaciones, y clasificando primeros a los cuartos de final.
Finalistas
Hasta el momento habían logrado ganar sin grandes dificultades, pero cuando llegaron a la instancia final debieron enfrentar a los vicecampeones de 2012, los brasileros Univille.
Manuel asegura que “ese partido fue el único donde sufrimos la victoria. Ellos jugaban mucho con la estrategia… “.
Quedaban veinte segundos, y los brasileros seguían peleando sin tregua, pero Manuel y sus compañeros tampoco aflojaban, quince segundos, diez, cinco… y por fin escucharon el pitido final.
Al grito de “Uruguay nomá” y un abrazo grupal, los cinco colonienses celebraban la victoria.
Pero la competencia no había terminado, todavía faltaba el conteo de puntos por parte de los jueces, debían mirar los videos del partido para corroborar el puntaje de cada equipo.
Los nervios volvieron por otros cinco interminables minutos; gracias a un error táctico de los brasileros que perdieron dos puntos, no hubo empate ni segundo partido.
El equipo uruguayo fue el campeón de la noche y la alegría era inmensa.
¡Bienvenidos, campeones!
Mientras tanto, en Colonia vivían el minuto a minuto del partido a través de Facebook y mensajes por celular.
La victoria de los jóvenes fue una fiesta para sus amigos, familiares y profesores del liceo. Enseguida se puso en marcha la organización de una gran bienvenida para los campeones.
El domingo 27 de octubre de 2013, en el aeropuerto de Carrasco, un grupo de personas provenientes de Colonia esperaban ansiosos con banderas y carteles a Manuel, Christian, Lucas, Santiago y Matías, los héroes del momento.
“Fue una hermosa sorpresa encontrarse con esa bienvenida. Al otro día, en Colonia, nos hicieron un recibimiento en el liceo con alumnos, profesores y nuestras familias, fue otro momento muy emotivo” recuerda Manuel.